Llega la Navidad y, con ella, los platos repletos de comida decadente, pasteles cremosos y un flujo interminable de bebidas gaseosas. Y luego vienen las consecuencias: los vientres hinchados, la lentitud y toda una lista de problemas de salud que le siguen. Año tras año, millones de estadounidenses se encuentran en esta situación exacta. Los excesos de la temporada navideña, las porciones adicionales de comidas ricas y con muchas calorías y las innumerables bebidas azucaradas provocan un aumento de la cintura y molestias digestivas. No es ningún secreto: las estadísticas han demostrado que más del 45% de los estadounidenses sufren una hinchazón significativa durante y después de la temporada navideña, y las cifras están aumentando.
Tanto hombres como mujeres se sientan a celebrar con familiares y amigos y, poco después, aparece el malestar. Los estudios demuestran que casi el 60 % de los adultos sufren hinchazón causada por comer en exceso, y las bebidas gaseosas empeoran las cosas.
Imagínese cuánto más fácil sería pasar las fiestas sin toda esa incomodidad. Se acabaron los pantalones apretados que le quedan perfectos antes de la fiesta, se acabó la sensación de lentitud y cansancio al intentar disfrutar de momentos preciosos con sus seres queridos. Es hora de dejar de ser parte de las estadísticas y hacer de la Navidad un momento de alegría, no de hinchazón. Hay una manera de disfrutar de todo lo que las fiestas tienen para ofrecer (el calor, las comidas festivas, las risas) sin pagar el precio con su salud.
Imagina saborear tus comidas navideñas favoritas mientras mantienes tu estómago bajo control, despertándote a la mañana siguiente sintiéndote con energía y ligero en lugar de lamentar esa segunda (o tercera) porción de pavo o pastel. Este año, las cosas pueden ser diferentes. No tienes que ser uno de los millones de personas que sufren molestias después de cada reunión festiva. Finalmente puedes disfrutar de la celebración sin los kilos de más que te cuelgan como un regalo de Navidad no deseado.
Ahora más que nunca, la gente busca formas de mantener su cintura esbelta durante la temporada navideña. Con casi el 70% de los adultos estadounidenses con sobrepeso u obesidad, la preocupación por el aumento de peso durante las fiestas nunca ha sido mayor. Pero no se trata solo de la apariencia, sino de la salud a largo plazo. Las investigaciones han revelado que la persona promedio aumenta entre medio kilo y dos kilos durante la temporada navideña. Si bien eso puede no parecer mucho, esos kilos de más a menudo no desaparecen, sino que se van acumulando lentamente año tras año.
Imagínate esto: mesas festivas repletas de platos deliciosos, pero tú tienes el control. Sigues disfrutando de los sabores y las tradiciones que hacen que la Navidad sea especial, pero con consejos que evitan que tu estómago se sienta como un globo a punto de estallar.
No es de extrañar que cada vez más personas busquen soluciones como ésta, especialmente si tenemos en cuenta que muchos estadounidenses acaban visitando médicos o incluso salas de urgencias después de Navidad debido a problemas digestivos causados por comer en exceso.
Con esta guía, entrarás en la temporada navideña equipado para mantener tu vientre plano, tu salud en orden y tu ánimo en alto.